Sobre “La Teta de Botero” y el cine con causa.
El pasado fin de semana
tuve la oportunidad de ver el cortometraje “La Teta de Botero” por invitación
directa de su realizador, el actor Humberto Busto. Es un cortometraje que
reflexiona sobre un tema muy serio: el cáncer de mama.
Algunos médicos
consideran esta afección una epidemia. En México es la segunda causa de muerte
en mujeres entre los 30 y los 54 años de edad. Es un flagelo que no distingue condición
socioeconómica, étnica o cultural. El
problema es que sólo el 10 por ciento de los casos se detecta en etapa 1, por las
conocidas deficiencias de la Seguridad Social nacional. De toda la población
femenina en México, solo el 40% tiene este beneficio, y si consideramos que se
trata de una enfermedad de tratamiento costoso, podemos comprender porque es la
segunda causa de muerte en mujeres en la edad madura en nuestro país. Pero
también hay una tasa de supervivencia a costa de la extracción de los senos. Y
la mayoría de las mujeres en México —y en el mundo supongo— no pueden pagar una
reconstrucción… tienen que vivir así. Pero ¡Vivir! Esa es la clave.
Es cierto que no todas
las mujeres veneran los senos. En un extraordinario ensayo sobre la mujer “Respuestas a una amiga” escribe
Elena Poniatowska:
“No me gustan los pechos. Las amazonas se cortaban el pecho
derecho para tirar al arco sin estorbo. ¡Qué bendición la de las mujeres sin
pechos! A Marie-Anne Poniatowka, mi prima bienamada, se lo cortaron muy joven y
le dije que la envidiaba. ‘Estás loca’, se enojó. Hubo una época en que sí amé
pechos y brasieres con ventanita porque amamantar a mis hijos fue padrísimo.
Era padrísimo ver como a medio camino cerraban sus ojos y les ganaba el sueño,
sus párpados iban cayéndose un poquito violetas al borde de las pestañas y me
hacían sentir que hacía algo que de veras valía la pena.” http://www.nexos.com.mx/?p=14203
Pero, sea que la mujer
venere sus senos o no. ¿Quién querría perder una parte de su cuerpo? Las
mujeres que deciden vivir con sus
mastectomías, son realmente amazonas,
guerreras de la vida. Y esta es la causa de “La Teta de Botero”. El corto, con
sensibilidad, reflexiona sobre la supervivencia emocional de una mujer que ha
pasado por el infierno de una doble mastectomía, y la contrasta con la
supervivencia emocional de un hombre en crisis. Son dos personajes que han
padecido procesos tanáticos, y combaten esa sombra con pulsiones eróticas,
vitales.
Un canto a la vida.
Es metaficcional pues
los sucesos que se han ficcionalizado y representado a través de unos
personajes y un relato, les han ocurrido realmente a los actores, Humberto
Busto y la primerísima actriz Patricia Reyes Espíndola. Amazona y luz de
nuestro cine.
Trailer LA TETA DE BOTERO from HUMBERTO BUSTO on Vimeo.
Hay películas cuya
causa es tan valiosa e importante como la obra misma, y yo soy muy fan de estas
películas. Con mucho valor social. Es un cine mexicano que si vale la pena,
aunque no gane los premios, ni tenga las mismas vitrinas que otros bodrios
autistas, sin más causa que el snobismo intelectual o artístico de sus creadores.
Si quieres promover
esta causa, y este cine, puedes comunicarte con Humberto Busto y solicitar una
función, una charla o una conferencia. Eso lo leí en el BLOG del proyecto y me pareció una magnífica idea. Es una forma de militancia y de activismo que desconocen muchos cineastas mexicanos:
El blog del proyecto:
Luis F. Gallardo
9 de Abril de 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión y tu crítica es muy valiosa para mi, por favor tómate un momento para comentar.